Leemos de pluma del Sr. Lagunero lo siguiente:
La ley electoral española se promulgó el 20 de enero de 1986. En su actual texto refundido con las catorce modificaciones que ha tenido, sigue siendo -lo fue siempre- antidemocrática, pues es anticonstitucional.
Esta ley es consecuencia de la Ley dictada por Adolfo Suárez para regular las primeras elecciones de 1977, con la que se pretende pasar del régimen fascista a un régimen democrático. Como quiera que, como veremos, la actual Ley electoral es virtualmente una copia milimétrica de aquella primera Ley elaborada por un gobierno franquista y, lógicamente, anterior a la Constitución que se aprueba el 29.12.1978, además de ser una Ley franquista, era una Ley preconstitucional que no se ajustaba, en absoluto, a lo que luego establece la Constitución. Por este motivo es imprescindible que analicemos detenidamente cómo se elaboró esa Ley de 14/marzo/1973, que regularon esas primeras elecciones libres en España. En ella está la “madre del cordero” del disparate antidemocrático y absurdo de que en el actual Parlamento español un diputado de Izquierda Unida necesite más de 400.000 votos y uno del PNV solo 51.000.